José Bastidas expone en Egipto

Desde hoy hasta el 29 de este mes (octubre 2018), el artista otavaleño José Bastidas, presenta su exposición pictórica “Antologías Andinas”, en la Galería de Arte Cairo Opera House. El crédito sarance participa como invitado especial y representante del Ecuador. De acuerdo al pintor local “Antologías Andi-nas”, se compone de 24 obras de arte realizadas al óleo sobre lienzo, con dimensiones de 70 x 80cm.

 “Llevo un bagaje de nuestro callejón interandino y pinturas en donde se plasma cultura, cerros, casa coloniales y rincones que dan forma a lo maravilloso del Ecuador”, señaló vía whatsaap, el artista otavaleño. La muestra pictórica cuenta con el apoyo del Ministerio de Relaciones Exteriores, el Ministerio de Cultura y la Embajada de Ecuador en El Cairo. Marco Rodríguez, escritor y ex presidente de la CCE, afirma: “Los cuadros de Bastidas me recuerdan a los “nabis” de proclividad a la simbología, rítmico y conceptuoso, todo conjugándolo con la libertad de medios”, explicó.

Perfil. Bastidas, nacido en Otavalo en 1960, ha participado en muestras colectivas en España, Colombia, Vene-zuela, México, Costa Rica y Bolivia. También ha expuesto su talento en países como Argentina, Brasil, Chile, Suiza, Bulgaria y China entre otros.


Fuente: «Bastidas expone su muestra andina, desde hoy en Egipto». elnorte.ec. 23 de octubre de 2018. Web. 17 de enero de 2019.

Dos bomberas

Tatiana Cartagena y Jennifer Cubi se han convertido en ejemplo para las mujeres del cantón. Son el mejor espejo de sueños e ilusiones, para cientos de chicas que también aspiran cumplir sus metas. Las dos son bomberas, llevan seis meses salvando vidas y apagando fuego. Ellas se sienten orgullosas de su trabajo. Luego de superar todas las pruebas, fueron enviadas a la Escuela de Formación de Bomberos de la ciudad de Quito, donde estuvieron nueve meses recibiendo las capacitaciones y pruebas de aptitud respectivas.

Tatiana y Jennifer también conservan una amistad de muchos años atrás.

Estudiaron juntas la primaria en la escuela Gabriela Mistral; el bachillerato lo hicieron en la unidad educativa Jacinto Collahuazo, aunque no tuvieron la o-portunidad de compartir aulas, se volvieron a encontrar en el curso para ser bomberas.

Tatiana Cartagena. Tiene 24 años y desde pequeña siempre le gustó la labor social. Su ‘debut’ con la casaca roja, fue en un incendio forestal en el sector de San Vicente, donde fue parte del equipo que apaciguó las llamas. “Los incendios forestales al igual que esta profesión demanda de mucho esfuerzo y sacrificio. Me gusta lo que hago y estoy feliz”, apuntó.

Tatiana quiere demostrar a la sociedad, que tanto los hombres como las mujeres son capaces de cumplir cualquier función.

Jennifer Cubi. Para ella ser bombera es un sueño que siempre tuvo en mente. Fue una de las mejores atletas de Imbabura, de hecho estuvo en muchas selecciones provinciales y participó en distintos campeonatos nacionales donde logró varios títulos. A sus 24 años ya se considera realizada. “Amo esta camiseta, es algo muy bonito. Hemos demostrado ante la sociedad que las mujeres también somos capaces”, explicó.

Un deslave en la comunidad de Moraschupa en la parroquia de San José de Quichinche, donde rescató un cadáver fue la primera emergencia que le tocó efectuar. “Fue algo muy duro, me quedó la satisfacción que se pudo evitar que el desastre fuera mayor”.

Wilson Jaramillo, subcomandante de la institución bomberil, aseguró que es la primera vez en la historia de la institución que se cuenta con personal femenino. “Las compañeras han terminado su proceso de formación técnico. A ellas se les entregó la acreditación como Bombe-ros, por lo tanto están registradas en el escalafón de servicios de esta institución, como personal acto e idóneo a partir del 01 de abril del presente año”.


Fuente: Quisoboni, Roibnson. «Ellas desafían los estereotipos». elnorte.ec. 21 de octubre de 2018. Web. 30 de enero de 2019.

Kuya Ñusta 2018

María Belén Oyagata, representante de la comunidad de Gualsaqui, fue elegida el pasado sábado como la nueva Kuya Ñusta 2018, informó el portal lahora.com.ec. La ceremonia se efectuó en el parque Bolívar, donde participaron siete mujeres kichwas en representación de los pueblos de la sierra norte del país. La primera salida de las ñustas fue en una danza grupal, en la segunda presentación cada una de ellas hizo una demostración de las costumbres y prácticas propias de los pueblos indígenas, como el fortalecimiento de la identidad, interpretación de los instrumentos andinos, el protocolo del fallecimiento de un familiar, elaboración de la taza para recoger los granos, las artesanías como medio de emprendimiento, costumbres de la fiesta indígena y ritos para preparar la siembra.

En la tercera y última salida las candidatas lo hicieron en su vestimenta de gala, con la cual expresaron cada una su mensaje sobre temas referentes a la niñez, jóvenes y adultos.


Fuente: «María Belén Oyagata, la nueva Kuya Ñusta 2018». EL NORTE. 24 de septiembre, 2018. Web. 29 de diciembre, 2018.

Patrimonio intangible

La ciudad de Otavalo, situada en el norte de Ecuador, cierra este 15 de septiembre del 2018 sus fiestas más grandes conocidas como «Yamor», con la aspiración de que sean reconocidas patrimonio cultural intangible junto a sus lugareños. Desde finales de agosto, y hasta esta semana, han tenido lugar 45 eventos en varios puntos de la pintoresca urbe para conmemorar unos festejos que llevan el nombre de una bebida fermentada elaborada a base de siete tipos de maíz y que simboliza la época de la cosecha. «Las Fiestas del Yamor son una de las celebraciones principales de la época del Kuya Raymi (celebración ancestral de los pueblos indígenas de la sierra ecuatoriana el 21 de septiembre)», explicó Edwin Tituaña, coordinador de los pueblos quichuas del Gobierno Autónomo Descentralizado (GAD) municipal de Otavalo. 

Tocado con un sombrero oscuro de fieltro y la característica trenza otavaleña, el responsable municipal afirma que «parte del patrimonio cultural natural es justamente eso, que como pueblo originario estamos vivos y presentes aquí y en todo el mundo». Aclaró que la identidad se ve representada «en la fortaleza de la vestimenta de sus vecinos, en sus trajes tradicionales, su lengua, el quichua y su fisonomía», un legado que señala a la comunidad y que tratan de conservar como un patrimonio cultural natural. 

En 2003 esta ciudad de la provincia de Imbabura fue declarada por la Cámara Legislativa como Capital Intercultural del Ecuador por por ser un símbolo nacional, y referente internacional de preservación de la vida de los pueblos andinos y latinoamericanos. Su mercado artesanal indígena, llamado «La Plaza de Ponchos», considerado uno de los más grandes de Suramérica, es un buen ejemplo de la conservación de la fabricación textil ancestral y la elaboración de artesanías como los coloridos collares de cuentas que lucen las otavaleñas, denominados «gualcas» en quichua. «Es bien conocido que la gente otavaleña tiene mucho renombre y trayectoria por su fortalecimiento identitario. 

En parte, se debe al talento musical y la oferta de productos que trabaja artesanalmente», añade Tituaña. Lo hace junto a una banda musical familiar integrada por un padre y varios de sus hijos que interpretan melódicas y rítmicas canciones populares andinas en medio del mercado artesanal. «El alcalde de Otavalo, Gustavo Pareja Cisneros, está abriendo espacios para que la gente de las comunidades y parroquias del cantón puedan dar a conocer la música, el teatro, la danza y su talento», indicó por su parte Rosa Maldonado, responsable de la dirección de comunicación del GAD de Otavalo. 

La fiesta del Yamor se remonta a épocas inmemoriales pero fue un grupo de jóvenes otavaleños los que volvieron a institucionalizarla en 1952. En los últimos años este tipo de conmemoraciones aglutinan a más de 100.000 visitantes, lo que convierte la festividad en una de las más concurridas de la región y signo de que «el racismo hacia las nacionalidades indígenas en Ecuador está desapareciendo», refirió Maldonado. Reconocidos internacionalmente por su indumentaria y sus dotes para el comercio, la legislación ecuatoriana respeta sus costumbres y, por ejemplo, en el Ejército y otras instituciones está prohibido obligarles a cortar su reconocible trenza o largos cabellos. «Parte de nuestra identidad es precisamente nuestra trenza, nuestro pelo largo, donde, según la cosmología andina, se encuentra toda la sabiduría y el conocimiento ancestral que heredamos», dice Tituaña al aclarar que también es una tradición que siguen otros pueblos andinos de Ecuador, Perú, Bolivia o Chile. 

De momento, el ministro de Cultura y Patrimonio, Raúl Pérez, se ha comprometido a analizar la propuesta para que Otavalo se convierta en patrimonio inmaterial, lo que abriría la puerta a que la urbe, situada a 2 550 metros sobre el nivel del mar, reciba un definitivo respaldo a las tradiciones que atesora con celo ancestral.


Fuente: AGENCIA EFE. «Otavalo, emblema del patrimonio indígena intangible del Ecuador.» 15 de septiembre, 2018. Web. 3 de noviembre, 2018.