La Plaza Cívica

Un espacio desierto se encuentra en el barrio Los Portales, en las calles Juan Montalvo y Modesto Jaramillo que con la construcción de una Plaza Cívica para Otavalo busca cambiar el panorama y transformarlo en una plaza llena de cultura y tradiciones para el cantón.

Antecedentes
En la administración del 2000-2005 se establece el proyecto de reubicación del Mercado 24 de Mayo, concluido en el 2013. Ahí comienza un concurso de estudios técnicos del conjunto de patrimonio cultural en dónde el arquitecto Eduardo Báez, especializado en patrimonio gana y modela ciertos diseños para la construcción.

Los estudios de este proyecto se hicieron a través de un financiamiento del Banco de Desarrollo y en convenio con el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural, por considerarse un bien patrimonial.

El INP califica esta iniciativa como un proyecto de gran impacto, sin embargo, tras la entrega de estos estudios técnicos de edificaciones patrimoniales en el 2015 se detiene para ser retomado por la municipalidad en el 2019 y encargado directamente al departamento de Ordenamiento Territorial y Planificación a cargo de la arquitecta Consuelo Pabón.

Financiamiento
Tras una actualización de estudios, por el tiempo transcurrido, se estima un valor de 6 millones de dólares, añadiendo la recuperación de algunas edificaciones patrimoniales como Los Portales, la Gallera Municipal, la exescuela Gabriela Mistral, muros anclados y edificios municipales.

Debido a la baja capacidad de endeudamiento municipal se imposibilita acceder al crédito de Banco de Desarrollo por lo que se prioriza la edificación de la Plaza Cívica, mediante administración directa.

“Se ha postergado por mucho tiempo por razones de la pandemia y, la situación económica para el proyecto es desalentadora, sin embargo, desde la municipalidad se lo ha tomado como un reto de eficiencia”, dijo.

Diseño
Se propone un sitio como homenaje a la interculturalidad de indígenas y mestizos, culturas que predominan el cantón, y revele expresiones de conocimientos ancestrales como la agricultura a través de las fases lunares que se plasmará en la plataforma.

Para fortalecer el sentido de pertenencia e identificación de la ciudadanía se implementarán pliegues arquitectónicos con grandes jarrones representando las 9 parroquias, con árboles trazando la morfología del cantón, estos pliegues también figurarán como escenarios para reanimar el ámbito artístico y cultural de la población otavaleña.

Como un recorrido a través de la historia se plasmarán los primeros asentamientos de los otavalos en el piso de piedra.

El inicio de la construcción se estima para el mes de enero y su conclusión para el mes de julio.


Fuente: «¿Cómo inició el proceso para la construcción de la futura Plaza Cívica de Otavalo?» Diario EL NORTE, 29 de noviembre de 2020. elnorte.ec. Web. 30 de noviembre de 2020.

El cementerio Samashunchik

El cementerio indígena Samashunchik (Descanse en Paz, en español), del cantón Otavalo, es el primero de la provincia de Imbabura que cerró sus puertas a las visitas. Desde este martes 27 de octubre del 2020, hasta el 4 de noviembre próximo no está permitido el ingreso de personas a propósito del Día de los Difuntos. Así lo resolvió la directiva de la Unión de Organizaciones Indígenas del Cantón Otavalo (Unorico), que administra este camposanto del norte de Ecuador, para cumplir con la resolución que aprobó el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal.

Con ello se busca evitar la aglomeración de personas, como una medida para evitar la expansión del covid-19. El COE nacional exhortó a los 221 municipios del país para que cierren los cementerios del 30 de octubre al 3 de noviembre. La restricción es para las visitas durante el feriado que se extenderá del 31 de octubre al 3 de noviembre.

Al otro extremo del cementerio Samashunchik funciona el camposanto Jardín de Oración, también conocido como cementerio de los mestizos. Están separados por una pared. Ese panteón cerrará sus puertas del 31 de octubre al 3 de noviembre.

El camposanto abrirá sus puertas solo en caso de sepelios. Marcelo Burbano, secretario del COE cantonal de Otavalo, explica que la restricción es solo para visitas. Sí están permitidos los sepelios. Pero, si el deceso es por covid-19 podrán asistir un máximo de cinco personas. Si es por otra causa, podrán acudir hasta 30 deudos.

Según Luis Guamán, presidente de la Unorico, esta es la primera vez en la historia que no se permitirá el ingreso de familiares y amigos al cementerio, durante el Día de los Muertos. De acuerdo a la tradición de los kichwas de Otavalo, los lunes y jueves son los días propicios para visitar las tumbas. Los familiares de los difuntos acostumbran a llevar envases con la comida y frutas favoritas del fallecido y compartirlas con los asistentes.

Pero, ante la pandemia se está limitando esta costumbre, que se desarrolla especialmente en los primeros días de noviembre. Según Guamán, se recomendó a los dirigentes de las 68 comunidades que conforman la Unorico que por esta vez realicen ceremonias de recordación de los difuntos en sus casas. En el resto de cantones de Imbabura como Ibarra, Antonio Ante, Cotacachi, Pimampiro y Urcuquí los cementerios se cerrarán de acuerdo a las disposiciones del COE nacional.

Fuente: «El cementerio indígena de Otavalo, en Imbabura, no recibirá visitas durante nueve días». Diario EL COMERCIO, 27 de octubre de 2020. elcomercio.com. Web. 17 de noviembre de 2020.