Soy la primogénita de una familia grande y hermosa, con mis padres aún vivos en esta fecha, 6 hermanos, 3 hijos, 7 nietos, 13 sobrinos y 4 sobrinos nietos, diseminados en Ecuador, EEUU., México y Europa.
Mi primera infancia es una etapa que recuerdo con gran alegría porque fue mágica, llena de risas y aventuras en el marco de la familia pequeña y disfrutando de las familias grandes, tanto paterna como materna, ya que tuve el privilegio de gozar de mis abuelos, tíos (tías que se peleaban por cargarme), hermanos y primos con quienes me interrelacioné hasta bien entrada la adolescencia y sigo gozando de la presencia de muchos de ellos hasta ahora.