Jorge Escobar Vargas

𝗨𝗡 𝗔𝗣𝗔𝗦𝗜𝗢𝗡𝗔𝗗𝗢 𝗣𝗢𝗥 𝗘𝗟 𝗠𝗜𝗖𝗥𝗢́𝗙𝗢𝗡𝗢
Escrito por Jaime Núñez Garcés

Sin la más remota posibilidad de incurrir en una equivocación, puedo aseverar que Radio Turismo de Otavalo, catapultó a connotadas figuras del quehacer radiofónico, tal es el caso de Edison Vargas Acosta, Gonzalo Rosero y Edmundo Grijalva. En la presente reseña biográfica, trazaré sucintamente el perfil de otro valioso exponente como es Jorge Escobar y su aquilatada trayectoria radial.

Allá, por 1938, el hogar de Celia Vargas y Humberto Escobar, vio nacer a su primogénito, cuya niñez transcurrió en la apacible ciudad de aquel entonces. Los seis años de escolaridad desarrollados en la José Martí, constituyeron el pasaporte, previo a cursar la educación secundaria en el Colegio Nacional Otavalo. Su buena dicción y modulación innatas, le abrieron las puertas para que ingrese a la emisora local en calidad de locutor. Cursaba el cuarto año. Estableciendo una esforzada dicotomía digna de encomio –estudiar y trabajar– en arduas jornadas diarias entre las 6 am y las 22h00, culminó la segunda etapa de instrucción. Conviene señalar que en sexto curso tuvo como compañero a Álvaro San Félix, fijándose un vínculo de amistad que, a corto plazo, ayudaría al flamante bachiller a incursionar en otra disciplina de este mundo mágico: el radioteatro.

La firme convicción de obtener un título universitario, obró positivamente. Con su equipaje repleto de ilusiones, se trasladó a Quito, en su interior, el apego a la radio permanecía intacto, tanto que no tardó en retomar esta indeclinable actividad cuando solicitó una oportunidad en Radio Central. Constituyó el primer peldaño de aquella escalera de realizaciones que continuó en Radio Nacional del Estado, etapa donde cultivó la absorbente modalidad del radioteatro junto a un equipo humano conformado por Fernando Fegan, Erika Von Lippke, Jorge Zaldumbide, Lola Vaca y Cristel Rex Villacís, elenco destacado mediante el cual los “Cuentos de la literatura universal” captaron enorme sintonía. Posteriormente, se familiarizó con otra faceta inmersa en este ámbito: la elaboración de libretos, labor cumplida a cabalidad durante su fructífera permanencia en Radio Quito, estación donde transcurrió su mejor época. En el listado de producciones constan un total de 55 “Leyendas y tradiciones del Ecuador” y 25 capítulos que formaron parte de la “Antología del relato ecuatoriano”.

Sin desmayar, manteniendo esa dualidad meritoria de laboriosidad y formación académica, desarrolló su irrebatible inclinación en las emisoras Casa de la Cultura y HCJB donde el montaje de las radioteatralizaciones contaba con la dirección de Gonzalo Portugal. Época de oro, maravillosa, única, de radio enteramente audible, cuando el dial de “Emisoras Gran Colombia”, constituía una especie de la universidad del periodismo deportivo, donde nuestro apreciado paisano también prestó sus servicios. Sus dotes de locutor hecho y derecho, brillaron también en Radio Nacional Espejo, Gemas y Musical, del añorado Núcleo Radión.

Locución, actuación; los roles de libretista y presentador, complementaron su performance. Perteneció también a una agrupación de jóvenes revolucionarios culturales “Los tzántzicos”, encabezando y dirigiendo un programa radial denominado “El ojo del pozo”.

Después de quince años de trajinar radiofónico, el ejercicio de su profesión (Dr. en jurisprudencia), le absorbió y persiste hasta la fecha.

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Autor: Jaime Núñez Garcés, 9 de julio 2023.